29 de abril de 2020
Ante el ingreso al Parlamento de la nueva versión de la Ley de Urgente Consideración, la Dirección Nacional del Movimiento de Participación Popular declara:
- Que las acciones del Gobierno representan una afrenta a la democracia y al sano debate que debe desarrollarse no solo en el Parlamento Nacional, sino en el seno de la sociedad. Pretender modificar aspectos fundamentales de todo nuestro ordenamiento jurídico a través de un proyecto de ley, que por los plazos constitucionales deberá discutirse en apenas 75 días, representa una muestra de autoritarismo de parte del Gobierno.
- Este mecanismo utilizado por el Gobierno, no solo ha merecido las críticas de parte de nuestro Frente Amplio, sino que estas han surgido desde los más diversos sectores de la sociedad.
- En este sentido, vulnera el espíritu que prevé la Constitución de la República en el Artículo 168, para las leyes de Urgente Consideración. Así, se establece a texto expreso que no se podrá enviar más de un Proyecto de Urgente Consideración por vez. Claramente, la intención de la norma es que la Ley de Urgente Consideración solo sea una vía extraordinaria para legislar aspectos urgentes. Dicho con otras palabras, cuando la emergencia así lo amerita.
- No es el caso de este proyecto de ley, donde la urgencia no está acreditada de acuerdo a los contenidos del proyecto y además se compone de más de 500 artículos. Una cantidad de artículos y temas que deberían repartirse en veinte proyectos de ley, pero como la Constitución establece los límites antedichos, el Gobierno los termina incluyendo en un único proyecto de ley.
- Por tanto, existiendo una Urgencia real (emergencia sanitaria), que no es en la que se funda el Poder Ejecutivo, lo que se pretende en realidad es imponer una agenda neoliberal, de manera rápida y soterrada, haciendo desandar muchas de las conquistas de los últimos quince años. Resulta preocupante el retroceso en materia de derechos que se establecen en el Proyecto de ley, abarcando las áreas más diversas: desmonopolización de ANCAP, portabilidad numérica debilitando a ANTEL, limitación al Derecho de Huelga, etc.
- Nuestra Organización no tiene inconvenientes de dar este debate, ya que tenemos muy claras cuáles son nuestras posturas al respecto. Sin embargo, debemos destacar que quienes pretenden eludirlo son los propios representes del Gobierno, que optan por este mecanismo jurídico de rápida aprobación. Una discusión profunda que debería ser amplia, abarcando a los sectores más diversos de la sociedad, termina siendo impuesta entre gallos y medias noches.
- Las respuestas a esta política regresiva, deberán desarrollarse en los más diversos ámbitos. Desde el Parlamento, sin dudas, daremos batalla contra este proyecto neoliberal. Sin embargo, somos conscientes que la lucha deberá desarrollarse en todos los ámbitos de la sociedad. La lucha se dará desde la calle, desde la militancia y de la mano del pueblo organizado.
- Como en el pasado, el presente y el futuro serán nuevamente de organización y lucha.
Habrá patria para todos.