“Voy a ser el presidente que construya una sociedad más integrada, un país más integrado, donde además y a pesar incluso de las diferencias, jamás nadie podrá quedarse atrás”.
“Y a pesar de la lluvia, está aclarando el horizonte”, dijo Orsi al inicio de su oratoria este domingo 24 de noviembre, jornada en la cual los uruguayos refrendaron otra vez su compromiso con la democracia y la república en una jornada ejemplar.
“Esta noche, sin dudas – prosiguió Orsi –, es de muchísimos agradecimientos a todos y todas, que han hecho esta campaña ejemplar, en la que logramos lo que logramos: nada menos que el triunfo. Un triunfo que empezó allá, en octubre, cuando la ciudadanía resolvió la integración de nuestro Parlamento.
Un agradecimiento a quienes llevaron nuestra propuesta, repartieron listas, estuvieron en los locales de votación y los que todavía están ahí para enviar los datos a la Corte Electoral. Un agradecimiento para aquellos y aquellas que nos esperaron en cada rincón del país, desde Bella Unión a Rocha, de colonia a Río Branco, de Pueblo Ansina a Punta del Este, San Ramón a Treinta y Tres. En cada rincón recibimos el apoyo y afecto, la esperanza para seguir caminando hasta el día de hoy.
Y gracias también a aquellos que hicieron de la militancia política, de nuevo, un ejemplo a nivel regional y continental. Seamos conscientes que hace ya 40 años concretamos, como nunca antes habíamos tenido, un período tan largo de democracia de manera ininterrumpida, donde cada 5 años vamos a las urnas para resolver el futuro de nuestro país de manera democrática y en libertad.
Y cuando me refiero a todos los militantes, también me refiero a aquellos que abrazan otra idea, otras banderas, porque ellos también son constructores de esta democracia. Porque este país es ejemplo de acumulación positiva, donde ladrillo tras ladrillo se va construyendo un país donde tenemos diferencias, por supuesto, pero jamás tiene que haber ni un lugar para el agravio o la descalificación.
Y es por eso que, una vez más, el país de la libertad, de la igualdad y también de la fraternidad, que es nada más y nada menos que la solidaridad y el respeto por los demás. Sigamos en ese camino.
Hoy estamos muy felices quienes abrazamos estas banderas. Hoy estamos muy felices aquellos quienes reconocemos que accedimos al triunfo. Pero entendamos, ciudadanas y ciudadanos de mi fuerza política y quienes nos acompañan, hay otra parte de nuestro pueblo que, como nosotros hace un tiempo, hoy están con otro sentimiento. Esa gente también nos tendrá que ayudar a construir un país cada vez mejor. A ellos también los precisamos.
Y el mensaje y no puede ser otro que sigan abrazando las banderas de las ideas, porque a partir del debate de ideas se construye u país mejor, una sociedad mejor y, por sobre todas las cosas, una república democrática con futuro.
No hay futuro si le ponemos un muro a las ideas. Porque esto es así, la democracia es así. Cuando nos planteaban qué se sentía sufrir una derrota, yo decía una y otra vez – más de una vez – sufrimos derrotas, la que no podemos sufrir jamás es aquella que coarta las libertades, la que suspende la democracia. Esa es la que nunca podemos aceptar. Y la que se pretende llevarse puesto a los partidos políticos. Larga vida a los partidos políticos. Larga vida a nuestro sistema democrático republicano.
Voy a ser el presidente que convoque una y otra vez al dialogo nacional para encontrar las mejores soluciones.
Por supuesto, con nuestros planteos. Pero también escuchando muy bien lo que nos dicen los demás.
Voy a ser el presidente que construya una sociedad más integrada, un país más integrado, donde además y a pesar incluso de las diferencias, jamás nadie podrá quedarse atrás. Desde el punto de vista económico, social y también político.
Y tendrá que ser este, también, u país que camine hacia el desarrollo, la prosperidad. Seré también entonces el presidente del crecimiento nacional, del país que avance.
A eso invito a todos y todas.
Quiero saludar a cada rincón de mi país, que es maravilloso. Abracemos con fuerza la idea de que Uruguay es uno solo, a pesar de nuestras diferencias territoriales. Quiero saludar a cada uno de los militantes que están ahí, en las localidades pequeñas, en el interior profundo y en mi querido Canelones a quien tanto quiero. Esos son mis compromisos. Los del trabajo para integrarnos, para dialogar y crecer.
Y siempre dije: no son tiempo de promesas, pero me comprometo a una sola: a partir de mañana vamos a laburar muchísimo todos los días y no aflojar jamás para la construcción del Uruguay que nos merecemos.
Donde nadie se sienta relegado. Eso nos enseñaron nuestros referentes y vaya un reconocimiento al general, a Tabaré, a Danilo. Al queridísimo Mariano, que estarás en alguna placita de Montevideo. Mi reconocimiento a Pepe y Lucía. Al queridísimo Marcos, aprendí muchísimo y seguiré aprendiendo.
Eso es lo que se hacer, escuchar mucho, decidirnos y trabajar fuerte por un Uruguay mejor. Los invito a todos. Muchísimas gracias por todo este esfuerzo. Salud al Uruguay, salud compatriotas. Gracias!
La emoción de dos amigos que ofrecieron sus energías por la unidad popular y la mejora de los más sumergidos de nuestra América.
Desde Las Piedras, donde el interior y el país metropolitano se abrazan, Yamandú Orsi llamó a reconciliar las distintas realidades para construir un país de certezas.
Proponemos un cambio en el que todos podamos vivir tranquilos, con más solidaridad, con más bienestar. “Sabremos cumplir”, dijo Yamandú Orsi.
Pepe estuvo en la localidad de San Bautista, en Canelones. Dando el último tranco para apoyar la posibilidad de un gobierno para todas y todos, con Yamandú Presidente.
No tiene antecedente en la historia de los últimos 50 años que un gobierno haya mantenido congelado los ingresos durante 40 meses, recordó José Mujica.
“Vamos a dejar el cuero en la estaca estos días”, dijo José Pepe Mujica. A dar otra vez ese ejemplo de militancia.