Yamandú Orsi apuntó sobre cuestiones fundamentales del caso Astesiano que se pierden en el debate político. El foco debe ponerse en la falta de cuidado a la institución Presidencia de la República.
La imagen del país fue dañada, dijo en diálogo con VTV Noticias, este jueves 13. A esto se suma que el presidente de la República, el ciudadano que nos representa a todos, estaba sentado encima de un polvorín ubicado adentro de la Torre Ejecutiva.
Según Yamandú, para levantar la mira y resolver esto hay que ver las responsabilidades políticas, que están adentro de la Presidencia de la República.
En cuanto a este punto, el de las responsabilidades, Yamandú recordó que el exdirector de Secretaría del Ministerio del Interior, Luis Calabria, renunció porque fue a atenderse la vista en el Hospital Policial.
Y aquí, en el caso Astesiano, con una cantidad sin definir de partidas de nacimiento truchas para vender pasaportes a ciudadanos rusos que vaya uno a saber de dónde vienen o si tienen relaciones con el delito, nadie se hace cargo.
Es en base a esta comparación que el problema también lo observa en la interna del Gobierno, porque no fue capaz de ver que se pone en riesgo la imagen del país y del propio Gobierno.
“Las prioridades del futuro gobierno deben basarse en las preocupaciones de la gente, y por eso ponemos foco en limpieza y movilidad”, subrayó Mario.
“Canelones no tiene nada que ver con el departamento de 2005” y va a más con Francisco Legnani intendente.
La bonanza fue para unos pocos. Y eso es total responsabilidad de la conducción del gobierno. Escribe Sebastián Sabini.
La nueva política internacional se erige sobre valores fundamentales no negociables: la defensa de la democracia, los derechos humanos, el medio ambiente, la paz y la seguridad internacionales.
La exposición de la ministra Fernanda Cardona precisa los datos y la evaluación sobre el último año de Ancap, empresa pública que presentó déficit por 118 millones de dólares y endeudamiento por 225 millones.
Con pérdidas y una parada técnica mal gestionada, urge en Ancap un cambio de gestión.