Estudié en la escuela n.° 81 de Punta Gorda, en el liceo n.º 10 de Malvín y en el IAVA. Cursé el primer año de Facultad de Ciencias Económicas, pero debí dejar para dedicarme a mi familia. 

​Soy la mamá de Alejandro y Fabián, y la abuela de Melina y Luca. En 2009, mi hijo Alejandro fue asesinado en el marco de una rapiña, lo que condicionó mi vida y forjó mi activismo social por visibilizar la figura de las víctimas y sus familias como sujetos de derecho.

En 2012, y luego de años de intenso trabajo, junto a otras dos familias fundamos la Asociación de Familiares y Víctimas de la Delincuencia (ASFAVIDE), la cual presidí hasta 2020, momento en que alterné como senadora suplente por el MPP 609 – Frente Amplio hasta el final del período legislativo.

Gracias a nuestro trabajo social logramos la aprobación de la ley 19.039, que otorga una pensión para las víctimas de delitos violentos. A su vez, la asociación civil que formé brinda servicios de atención psicológica y apoyo jurídico para quienes lo necesitan, a través de un convenio firmado con la Universidad de la República y la Facultad de Derecho; así como también con INEFOP y CAVID, facilitando el acceso a cursos y herramientas para quienes se acercan en busca de nuevas oportunidades.

Integré la dirección del Patronato Nacional de Encarcelados y Liberados, hoy Dirección Nacional de Apoyo al Liberado (DINALI).

En 2022, junto a Jaime Saavedra (exdirector de la DINALI) y familiares de personas privadas de libertad, fundamos la asociación civil Familias Presentes. Se trata de un colectivo social que vela por la rehabilitación de los internos en el marco de su privación de libertad sin perder contacto con sus familias, eslabón indispensable en el proceso de reinserción social que sigue a la privación de libertad.

En 2024 fui electa diputada por el MPP 609 para el período 2025-2030, en el que integraré la Comisión de Constitución y Códigos.