“¿Qué sentido tiene el éxito de la economía si no va al fondo de la sociedad y si la prosperidad no se reparte?”.
Nuestro querido José Pepe Mujica le recordó al presidente chileno Gabriel Boric, durante el diálogo que mantuvieron en M24 semanas antes de que asuma su mandato, que durante la campaña electoral todos le hablaban del “modelo chileno”. Pero ese relato era contradictorio a los que le contaban los propios visitantes del país trasandino. “No confundan el PBI con la realidad de la gente”, reflexionó Pepe a partir de esta diametral cuestión entre el resultado económico y la llegada de los beneficios y los derechos a nuestra sociedad. Y así fue que, días después de escuchar a los visitantes, “estalló Chile” le comentó a Boric.
“Una sociedad puede tener éxito económico, pero deudas sociales terribles”, añadió Pepe. Porque, “¿qué sentido tiene el éxito de la economía si no va al fondo de la sociedad y si la prosperidad no se reparte?”, postuló.
¿Parece que el destino de la vida es sufrir y pasar privaciones? No, “la causa de la vida es luchar por ser felices; pero la causa es social, necesitamos desparramarla porque hasta los propios acomodados terminan viviendo mal, acumulando odios en la propia sociedad”.
Esencial es el reparto del crecimiento económico porque la desigualdad es el problema de nuestra civilización actual, definió Mujica. Llegará el momento en el cual algunos podrán hacer excursiones hacia la Luna, disfrutando de lo mejor de las capacidades humanas. Pero “¿no podremos generar sociedades más humanas para transformar el milagro de la vida en las ganas de vivir para todos?”.
En el fondo, la “lucha es por un cambio cultural”. “¿Podremos ser mejores los sapiens? ¿Ser menos egoístas y ser un poco más solidarios con los demás? He aquí el desafío: la lucha por una humanidad mejor y no solo más rica”.
Y para finalizar, le expresó a Boric: “cuidá el corazón, la moral, la presencia. Porque cuando se está aparentemente arriba, más que nunca no hay que olvidarse de los que están abajo. Y los que estamos por mitigar las desigualdades lo tienen que expresar en todos los gestos de su vida. Hasta siempre!”.
Los dirigentes de este país tienen que empezar por dar ejemplo. Sin eso, no se ganan el derecho de poner los puntos "a los que tienen plata para parar el huevo".
Lo mínimo que se le puede pedir a aquellos que saben algo es que hablen ahora, dijo Pepe Mujica.
Pepe está preocupado por la deuda social, peligrando un estancamiento de la economía en el entorno del 1% o 2%, insuficiente para resolver los problemas de tantos compatriotas.
Preocupación clave para el futuro del país es cómo mejoramos nuestra producción agroganadera nacional, el rol de Colonización y la soberanía alimentaria de la mano de la granja uruguaya.
Miles en la Marcha del Silencio de 2024. Pepe Mujica y Lucía Topolansky acompañaron y reconocieron que esta causa fue adoptada como parte del sentir de las nuevas generaciones.
La libertad, según Pepe, es tener una causa para vivir. Y Pepe reconoció a las clases de apoyo a liceales y UTU como un compromiso que nos demuestra que no todo está perdido.