“Hemos sobrevivido a mil batallas, ¿no vamos a sobrevivir a algunos garrotes? ¡vamos!”, proclamó la compañera Lucía Topolansky durante el “Mujeres con Yamandú Orsi” de este sábado 16.
Estamos en un momento clave. Nos atacan, nos pueden seguir atacando. No importa, dijo la compañera Lucía Topolansky, porque nosotros tenemos fortalezas para sacar. No tenemos que distraernos, tenemos que estar convencidos de que se trata de jugar todo por nuestra gente y con nuestra gente. Será nuestra gente quien nos va a dar los mejores consejos, agregó.
“Hemos sobrevivido a mil batallas, ¿no vamos a sobrevivir a algunos garrotes? ¡vamos!”, proclamó la compañera. Este ciclo electoral tiene como primera parada la elección interna y para ella tenemos a un gran candidato con Yamandú, expresó Lucía. Estamos convencidos de que lo atacan por esta razón: con encuestadoras y especialistas poniéndolo en un destacado escalón de la política uruguaya.
No perder tiempo ni perder pólvora en chimangos. Menos cuando tenemos una gran síntesis en nuestro programa político, con tantas horas de trabajo de tantos compañeros dedicados a la tarea. La compañera Lucía Topolansky cerró la actividad de este sábado 16, «Mujeres con Yamandú Orsi», que convocó a cientos de militantes detrás de la precandidatura del compañero.
Para cambiar un país se requiere mucha militancia. Acá se trata de hacer crecer a la fila india, porque ningún líder hizo nada solo. Se trata de la militancia, el aporte de cada uno para cambiar la sociedad y ponerse en el lugar de los demás.
Eso sí, como decía Rosa Luxemburgo: “cree el militante que, porque tiene el programa en el bolsillo, lo sabe todo; ¡se equivoca! Es apenas un rumbo”. Partimos hacia las elecciones internas de junio, a esta primera etapa.
Es el país el que necesita al Frente Amplio. Hay cosas que todos los días vemos. Queremos cinco años de esperanza para el país.
Lucía conoce los asentamientos desde 1958. Alumna de liceo, fue por primera vez a un “cantegril”, como le decían de forma despectiva. Desde allí, nunca más dejó de trabajar en la periferia de la capital, donde aprendió muchísimo. Hay una sabiduría desparramada en todos, pero hay que saber escuchar, traducirla y volcarla a los demás.
De aquellos años, se quedó con varias enseñanzas para la militancia política. Es imprescindible hacer sintonía con cada lugar y territorio. Como la gran herramienta de los municipios. Su propia definición es la de “el gobierno de cercanía”. Algo tan importante: en un mundo tan globalizado, lo que se está perdiendo es la comunidad”.
La política no es solo razón. También es el corazón, los sentimientos cuentan. Es construir con la gente, demandarle y pedirle su colaboración. Tenemos una oportunidad innegable, crecer y aprender de la gente, incorporar sus consignas.
El Pueblo a Pueblo del Frente Amplio fue de lo mejor que hizo en décadas, celebró la compañera. Miles nos respondieron, militantes o no. La gente fue convocada, sin ser condescendiente. “Yo le tengo muchísima fe al cara a cara, la gente quiere ser escuchada, precisa que la escuchen”, puntualizó.
“A no aflojar, ni un paso atrás, miles de pasos para adelante y la victoria será nuestra; ¡gracias compañeras!”, cerró Lucía.
“Mi deber como ciudadano y militante político es renunciar y presentarme ante la justicia para dar todas las explicaciones”.
La historia la construyen los de abajo, con el corazón abierto para luchar contra las injusticias sin pedir nada a cambio. Los que construyen el sueño de una patria para todos.
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Por un país que cuida la seguridad y orienta los recursos del Estado a atender lo que debe atender, no para perseguir intereses políticos, expresó Yamandú Orsi.
