Para la unión latinoamericana hay que ser inclusivos y abiertos, sin fanatismos. No es abdicar de nuestras ideas, es multiplicar, dijo José Mujica.
Pepe, comprometido con la unidad latinoamericana, promueve a las jornadas organizadas por la Confederación Sindical de Trabajadores/Trabajadoras de las Américas que se desarrollarán en Foz de Iguazú entre el 7 y el 9 de diciembre. En ese marco, encabezó la transmisión en vivo de presentación del evento junto al expresidente colombiano Ernesto Samper, Messelene Gorete da Silva y Rafael Freire, desde la chacra.
Una tarea de largo aliento cuyo final no está a la vuelta de la esquina, porque es una lucha por el cambio cultural tras dos siglos de construcción de nacionalidades. Así definió Pepe al camino de integración continental.
La unidad es comprendida por Pepe no como una herramienta de sometimiento de las naciones. Es para sostenerlas entre todos, para defendernos ante el mundo que se nos viene, advirtió. Esto no es de izquierda o derecha, es de “ser o no ser”. Si así fuera, sería débil. Es la construcción de la identidad del porvenir de nuestro continente, del apenas 6% de la población mundial.
Lo más importante en nuestros 200 años de historia fue comunicarse con el mundo rico. Educamos a nuestros hijos para que los mejores se vayan a trabajar afuera. Estamos “balcanizados” en el mundo intelectual. Las capitales están casi todas “atadas” a los puertos pero nuestros pueblos pasan penurias en la frontera para pasar de un lado al otro. Hablamos de libertad pero, ¿qué libertad tenemos para movernos entre nosotros?
Los sistemas eléctricos, más grandes, podrían ser más eficientes. No lo hacemos. Si los bancos de órganos estuvieran comunicados más vidas podríamos salvar. No podemos hacer clínicas de enfermedades raras en los países chicos, tenemos que verlo en escala continental. No podemos tener políticas de posgrados salvo que decidamos que las universidades se especialicen. Todo esto está en nuestras posibilidades y no son ni de izquierdas ni de derechas, son de sentido común, insistió Pepe.
Uruguay es un pequeño país que le vende más a San Pablo que a cualquier país europeo. Pero, teóricamente, despreciamos lo que tenemos en lugar de pelear para mejorarlo. “Este Mercosur de pobre no sirve”, se dice. Cuando en realidad esta organización regional debería abrirle las puertas a toda América Latina. Tenemos reglamentos para la importación de alimentos y no nos podemos poner de acuerdo.
La integración fue un sueño de intelectuales y de soñadores, rememoró Pepe en su charla. Pero subrayó que los pueblos deciden con el corazón. Por eso se precisan símbolos, fechas para sintetizar.
Reiteró que esto no es solo una bandera de izquierda. Tenemos que ser inclusivos durante este largo camino, abiertos, evitar el fanatismo. No es abdicar, es multiplicar. Por eso hay que agrandar la convocatoria. «Hemos estado ahogado por estrechos nacionalismos que miran a los vecinos de reojo; competencia de piojos entre nosotros», la definió.
El mundo desarrollado está en otra parte. Nos domina con sus bancos, sus medios. Necesitamos conocimiento, cultura y depender de nosotros mismos, resta sembrar mucho, adelantó Pepe mirando a las nuevas generaciones.
Compañeros. No es solo para encontrarnos en Iguazú. Es para que los movimientos sociales transmitan para abajo. La integración fue una lucha de intelectuales, pero nunca será lo que no tiene pueblo atrás. Hay que bajar, hay que entenderlo como es, no como nos gusta a nosotros. Hay que comprenderlo, ser parte de él sin idealizar.
Necesitamos que nuestros corazones entren en sintonía, hoy tenemos la cabeza pero los corazones todavía no laten por nuestra América. A eso los convocamos.
José Mujica
No tiene antecedente en la historia de los últimos 50 años que un gobierno haya mantenido congelado los ingresos durante 40 meses, recordó José Mujica.
“Vamos a dejar el cuero en la estaca estos días”, dijo José Pepe Mujica. A dar otra vez ese ejemplo de militancia.
El pueblo uruguayo merece vivir mejor. El crecimiento es prosperidad cuando llegamos juntos y cuando nadie queda rezagado. Porque somos muchas partes y un todo a la vez.
Hoy te invito a estar, con la razón y el corazón, por un mejor Uruguay.
La gran fiesta de la 609, este sábado 19 en la Plaza 1º de Mayo, congregó música, la alegría de la militancia y el compromiso por un futuro gobierno para todos, con Yamandú Orsi Presidente.
Ya no es un problema de ser frentista, es un problema de darnos cuenta que tenemos que salir de este pozo en el cual nos hemos metido.