¿Vamos a pasar la vida confundiendo ser con tener y trabajar para pagar cuotas pensando que eso es progresar? ¿O vas a tener una causa que te enamore para vivir?
Ese es el dilema que nos propuso Pepe Mujica este domingo 16. Porque la sociedad está hecha para tenernos mancitos. El mercado arregla. Compramos esto y lo otro y lo siguiente también. Cuando te acordás, dejamos de hacer una aventura a esta maravilla que es la vida.
El marco es cada vez más complejo, identificó Pepe. Estamos viviendo en un mundo cada vez más complicado. Lo que nos queda por delante es la lucha política, nadie nos va a regalar la prosperidad. Pero, ¿estamos a la altura? ¿Hoy el pueblo uruguayo podría hacer un Éxodo como en 1811? «Qué problema para enchufar los celulares, ¿no?», ironizó.
Es por esto que Pepe nos pidió compromiso, reflexión y militancia. Porque no se puede sostener una realidad que cambia con recetas antiguas. “Vengo a pedirles que pongan el alma en la cancha. Después que nacemos, podemos darle un rumbo a la vida”.
La igualdad pasa por el derecho de partida en la vida. Tener posibilidades medianamente semejantes. Después la naturaleza es una variedad infinita y repica permanentemente a lo largo de la vida individual. Pero Pepe remarcó que el sentido de igualdad de la izquierda es barrer con las aberraciones que significan la distribución injusta del ingreso y la riqueza. Porque hay niñas y niños que nacen en lugares condenados y no tienen la oportunidad ni podrán sembrar.
Una madre que no recibe más que ofensas no puede darles a sus hijos otra cosa más que lo que ha recibido. La primera maestra que tiene una gurisa, un gurí, es su madre. Cuando hablamos de la pobreza infantil no es darle un cheque para que coma mejor, es la promoción de la familia, de esa mujer que cría pero de forma global. Lo tenemos que hacer por conveniencia, sobre todo para los más acomodados, porque los hijos de la clase acomodada tendrán que bancar las consecuencias sociales de permitir que germine una sociedad enferma por la misera desde la base.
La movilidad social significa que el Estado va para adelante y se compromete. Pero no sobreestimemos a la capacidad estatal porque si no tenemos la fuerza moral para movilizar a parte de nuestro pueblo en esta tarea, el Estado no tiene fuerza para enfrentar el problema social.
Y hay que encarar grandes definiciones hacia el futuro de la humanidad. «Las máquinas van a servir al hombre o, al contrario, el hombre va a servir a las máquinas», preguntó Pepe. ¿Inventamos máquinas para que nos quiten trabajo o para vivir de forma más cómoda? Esas máquinas deberán aportar para la seguridad social, debemos empezar a discutir de estos temas. Donde hay sindicatos fuertes se puede hacer ese debate, pero en otros sectores es más complejo.
La democracia está renga porque hace todos los controles de arriba para abajo pero los seres humanos, en general, somos mucho más exigentes de jueces que de actores, cuando somos benignos de nosotros mismos. Conviene darle poder al pueblo, de abajo, porque cuando le das la chance de que se sacuda el lomo entonces te mueve el piso.
Y eso es bueno, el control de arriba para abajo no sirve para nada porque el «pacto entre bomberos» evita que nos pisemos la manguera. Necesitamos nuevos mecanismos para darle poder de control al pueblo. Eso también es revolucionario, postuló.
«Consejo para el futuro del PIT-CNT: cuando gobiernen los blancos hay que inventar una elección todos los años»…, ironizó. Hoy hacen buena letra para conseguir votos. Y recordó que la primera medida del Ministerio de Economía fue aumentar el salario del personal de confianza.
Se invirtieron 3.600 millones de dólares en infraestructura, dice el gobierno. Todo para pagar, porque los nuevos contratos se financian en el largo plazo, por lo tanto, la cuenta de los intereses es aún más grande que la obra. Al igual que la planta en Arazatí, lo pagará OSE en el largo plazo. «Juan Pueblo, eh…», advirtió Pepe. Eso es deuda interna en pesos indexados.
Nadie habla del choclo que hay para levantar por el próximo Gobierno. En elecciones, se sacan una «selfie» con cuanto novillo pasaba por ahí, pero el atraso cambiario es brutal: entre 15 y 20 pesos por dólar. Hoy se favorece a la importación y se compraron autos como nunca pero después no hay dólares para atender a los gurises pobres.
En el largo plazo, el problema para un país pequeño como Uruguay es la necesidad por exportar mucho, porque debe importar mucha cosa. Si se paraliza la reinversión tendrá líos en el campo del trabajo. Un país esencialmente exportador de alimentos necesita cuidar al sector que vende bienes al exterior. El país no termina en el río Santa Lucía. El país es un todo, reclamó Mujica.
Los blancos son espectaculares para el atraso cambiario, pero la década del 90 nos mataron con esa. Más de 50 años «ensartados» con el FMI desde la firma de la carta de intención con el organismo internacional, con el contador Juan Eduardo Azzini. Recién en 2006, con Danilo Astori, recobramos soberanía.
“Yo no quiero más un presidente como éste”, porque “un mandatario tiene que tener sentido de puerta abierta, consultar con todo el país. No es un rey que hace lo que se le canta, representa el contrato de toda la sociedad, tiene la obligación de armonizar las diferencias y, si no lo logra, que lo intente de forma permanente porque el país no es de uno. Los que piensan distinto son adversarios, nunca enemigos, pertenecen al nosotros. Este es un gobierno que no habla con la oposición”.
En la vida hay que renovar el pensamiento, proclamó Pepe. Ser revolucionario es una actitud intelectual, es la búsqueda de salidas cuando la realidad cambia. No puede existir algo peor que no percibir los cambios que se vienen.
Y para el futuro, expresó: «no sé si el mundo que viene va a ser más feliz; sinceramente tengo mis dudas, pero no tengo dudas de que está cambiando con una velocidad brutal, con el conocimiento en un lugar cada vez más importante. El desafío de los gurises y gurisas está en la cabeza».
Escucharnos y soñar el Uruguay que se viene 🇺🇾
— Daniel Caggiani (@DCaggiani) June 16, 2024
Gracias Pepe por seguir enseñando a luchar por los sueños, para que sean menos sueños y más realidad.
Siempre con la gente.
El 30 es con Orsi, es con la Gente ✌️#ConOrsiVolvemos pic.twitter.com/foc5LxeTM0
La emoción de dos amigos que ofrecieron sus energías por la unidad popular y la mejora de los más sumergidos de nuestra América.
“Voy a ser el presidente que construya una sociedad más integrada, un país más integrado, donde además y a pesar incluso de las diferencias, jamás nadie podrá quedarse atrás”.
Desde Las Piedras, donde el interior y el país metropolitano se abrazan, Yamandú Orsi llamó a reconciliar las distintas realidades para construir un país de certezas.
Proponemos un cambio en el que todos podamos vivir tranquilos, con más solidaridad, con más bienestar. “Sabremos cumplir”, dijo Yamandú Orsi.
Pepe estuvo en la localidad de San Bautista, en Canelones. Dando el último tranco para apoyar la posibilidad de un gobierno para todas y todos, con Yamandú Presidente.
No tiene antecedente en la historia de los últimos 50 años que un gobierno haya mantenido congelado los ingresos durante 40 meses, recordó José Mujica.