Salto Grande se ha convertido en una cueva de clientelismo político amparado por el presidente y la ministra de Economía, sostuvo Pacha Sánchez.
Una partida extra para la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande por 200 millones de pesos fue firmada por el Gobierno, otro disparate de la administración actual. El compañero Alejandro Sánchez identificó ante los medios que la delegación uruguaya firmó casi 40 contratos directos, todos militantes del oficialismo.
Este conjunto de personas que ingresó a dedo cobran suculentos salarios y cobrarán grandes jubilaciones, gracias a los cambios en los estatutos. Esto requiere un llamado de atención urgente por parte del Gobierno pero, lamentó Pacha, la administración actual mira para el costado.
Para colmo, la respuesta del canciller de la República fue reírse en la cara de todos los uruguayos.
Nadie se hace cargo. La ministra de Economía responde que ellos solo hicieron el refuerzo de rubro solicitado.
Es por esto que levantamos el planteo para llamar al Parlamento a varios secretarios de Estado. La compañera Bettiana Díaz no dudó en calificar como insuficientes las respuestas del Gobierno.
A todo esto, esta administración presenta datos desalentadores: menos salarios y jubilaciones, más deuda, menos recursos en medicamentos, vivienda y educación. La gente se merece un estado más transparente.
“La situación es peor de lo que esperábamos”, marcó la senadora sobre lo que dejó la administración anterior.
“Nosotros no somos una organización que pelea por los cargos sino para tener una agenda de transformación profunda para poner al Uruguay al servicio de nuestra gente”.
“La Ferrari está complicada, pero el único partido que ha dado garantías reales para salir de procesos tan duros es el Frente Amplio", expresó la senadora.
“Nos negamos a que esta sea una patria donde el proyecto de la gurisada sea agarrar un mango e irse del país para soñar”, dijo Bettiana en el Campamento MPP.
Prometemos seguir defendiendo la democracia y las instituciones, prometemos seguir defendiendo al pueblo en cada lugar que nos toque estar.
Las condiciones de nuestras cárceles afectan a privados y privadas de libertad, los trabajadores del sistema y las familias, subrayó Bettiana Díaz.