Yamandú Orsi: recuperar al país profundo, ese espíritu tan caro del artiguismo

Decir que todo el interior es campo es un error. El Frente Amplio, para elaborar su programa habló de territorialidad. ¡Por fin! Sin pensar en el país real, no tenemos salida, dijo Orsi.

El compañero Yamandú Orsi estuvo en Artigas para conversar con los miles de uruguayos que se acercaron a escucharlo. A construir el país desde el interior profundo, esa fue la propuesta.

Porque, en el norte del país, los problemas que se presentan en todo el Uruguay se multiplican por dos. La informalidad, la frontera, la lejanía de los centros de poder, pegan más duro.

Debemos “pensar qué cosas se necesitan por regiones, qué precisamos acá y allá y más allá, porque hay cosas comunes y otras muy particulares”, definió. Con ejemplos como mejorar la puntuación en las inversiones que piden apoyo por la Comap.

Esa visión de mirar hacia adentro, hacia el país profundo, tan característica del artiguismo, es lo que tenemos que recuperar.

El problema del cambio climático, severo, no se puede tomar en tono electoral

El cambio climático es otro desafío del país. Llegó para quedarse, dijo el compañero. Un proyecto nacional para sacar aguas de los pluviales requiere 2.600 millones de dólares, gran cifra pero que “de algún lado tienen que salir”, aseveró el compañero.

No se puede hablar con liviandad este tema, con tono electoral. Es una cuestión para tomarlo con seriedad, solidaridad y compromiso. Mano tendida es un factor clave, así como pensar para adelante, en especial por los que más sufren. Rememoremos el problema de la seca en Uruguay, que pegó fuerte en el desarrollo del país.

Yamandú también tuvo palabras para los miles de compatriotas evacuados tras la tormenta de esta semana, así como a los estatales, municipales, militares y particulares que se arriman a trabajar en clave solidaria con los más perjudicados.

Un país cada vez más chato, más desigual, más inseguro

Orsi subrayó que nuestro país está cada vez más desigual. “Más chato”, hasta da la impresión de que tiraron la toalla.

Nadie puede discutir que la marginalidad creció, que más de 3.000 uruguayos pasaron a la situación de calle. Se observa en todo el país, pero no es el país que nos cuentan. El país real es el de los rezagados, hay mucha gente que la está quedando y solamente les pueden dar una mano el Frente Amplio.

“Por eso tenemos que construir una nueva esperanza”, sentenció. Este país se desarrolla en la medida de que se beneficia de las mieles del desarrollo. Y esto se nota en la gurisada, sinónimo entre infancia y pobreza que nos duele hoy. Rompe los ojos, nuestros hogares más pobres tienen más gurises en un país cada vez más viejo.

Hay que cuidar a quienes tenemos. Apoyar a las madres, subrayó, con estímulos al Plan Caif, escuelas de tiempo completo. El estado tiene que resolver, de una buena vez, los cuidados de adolescentes, niñas y niños.

Y, por supuesto, ser conscientes de que vivimos en un país más inseguro. Hay que pensar el problema de la seguridad con cabeza integral: pensar el acceso a la justicia, defensorías de oficio, respetar a la Fiscalía y ponerle recursos al Poder Judicial. Cárceles que no sean más lo que hoy son: jóvenes pobres y adictos en el 80% de los casos.

También tecnificar a la policía. Hoy hablan de crear grupos especiales de policías, como si nunca hubieran estado en el gobierno. No quiero pensar que desconfían de lo que hoy tenemos, no quiero pensar que les van a dar allanamientos nocturnos sin herramientas para ellos. “¡A no plantear cuestiones facilongas, a plantear ayudas a nuestra gente, escuelas, policlínicas, intendencias, pero el Estado no se puede retirar de nuestros barrios!”, exclamó.

La adicción y la salud mental, hoy tan asociado con las infancias y adolescencias. Seamos conscientes de que queda mucho por hacer y que hay cosas que empeoraron notoriamente.

La fuerza del país está en su gente

Cuando definieron que al país lo sacan los “malla oro”, se olvidaron de la fuerza de este país, que está en “el pelotón”. Y los “rezagados” tienen que ser cada vez menos.

Este año podemos cambiar las cosas. Podemos ver que la fila india, de cara a junio y octubre, puede ser más larga cada vez. Tendiendo la mano a los vecinos.

Tenemos que empezar ya, votar mucho mejor en las internas y caminar hacia octubre. No embelezarse ni preocuparse con las encuestas. Tener la cabeza en alto ante los embates y las distracciones que se meten en las campañas, mostrando lo que fuimos, pensando en le país del futuro, pensando en que esto puede ser una ola que nos devuelva la esperanza de ese país en construcción.

Queremos ganar porque queremos gobernar: pacto educativo, producción y ciencia juntas, pensar en los más humildes

No queremos ganar porque sí, queremos ganar porque queremos gobernar. Es difícil ganar, es más difícil gobernar. Pero es más fácil si tenemos a la gente al costado, si tenemos la fuerza de las organizaciones sociales. Con la altura de abrazar a todos para resolver los temas productivos, con más ciencia y tecnología. Lo podemos resolver, incluso con los que no están con nostorso.

Con un pacto educativo que tengan a los docentes como protagonistas. Ser capaces de gobernar para nuestra gente. Gobernar para todo el país, fundamentalmente para los que más lo necesitan.

Estar firmes porque no podemos permitir que se nos hable de unidad y por otro, el propio presidente, como no le gustó la decisión de un fiscal, dice que se revise otra vez el tema de Antel Arena para proscribir a una compañera. A no aflojar ni un tranco ante algo nunca visto.

Este país desigual debe empezar a levantar a la gente más caída, necesita un compromiso para mejorar la convivencia e intervenir en los territorios con todas las herramientas estatales. No podemos gobernar con pocos, tenemos que gobernar para todos. Cuenten conmigo que yo cuento con ustedes.

Yamandú Orsi desde Artigas