Una campaña electoral embarrada como en las últimas semanas es algo inusual en el país. Preocupa el daño a la democracia, dijo Yamandú Orsi.
En Uruguay, no puede valer todo. Esto es un tema político, de movida de campaña, en un país que no está acostumbrado. No sabemos qué cosas están detrás. Hay daños a la persona, a la familia, pero sobre todo a la convivencia democrática.
No es contra una persona, es un estilo que va contra la democracia. Esta forma de mover cuestiones, con muchas cosas difusas que se observaron en procesos electorales de otros países, parece que vino para quedarse.
Este estilo que no era común en Uruguay no existía y si no hacemos algo, lo que corre en riesgo no es un candidato ni un partido, sino el sistema democrático. Hay que ser muy cuidadosos.
Esto escaló de una forma inusual. El daño que causa una mentira instalada con el uso de estos métodos. Ojalá que todos los precandidatos estén en una línea de defensa de la democracia.
No es una anécdota de una campaña, es una preocupación por los daños de un disparate largado a la opinión pública. No entramos en el juego que se busca. Es llamativa la premeditación y el desarrollo los acontecimientos, especialmente en redes sociales.
Pero, confirmó Yamandú Orsi: “acá no se rinde nadie”.
“Mi deber como ciudadano y militante político es renunciar y presentarme ante la justicia para dar todas las explicaciones”.
La historia la construyen los de abajo, con el corazón abierto para luchar contra las injusticias sin pedir nada a cambio. Los que construyen el sueño de una patria para todos.
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Por un país que cuida la seguridad y orienta los recursos del Estado a atender lo que debe atender, no para perseguir intereses políticos, expresó Yamandú Orsi.
