Los homicidios y su tasa de resolución son quizá el mayor indicador de seguridad y violencia en una sociedad, por su importancia intrínseca ya que se trata de vidas humanas pero también, y debido a esto, son los datos de criminalidad de mejor calidad.
En este contexto estamos presenciando un explosivo aumento tanto de los homicidios, las muertes dudosas pero también de la impunidad de estos delitos. En el primer semestre de este año hubo 186 homicidios frente a los 173 de 2019 pero las muertes dudosas crecieron de un 80% entre los promedios anuales de 2014-2018 y 2020-2022, pasando de 80 al año en el promedio (2014-2019) a 200 en 2022. Otro indicador que habla de la eficiencia del ministerio es la tasa de resolución de delitos: en 2015 quedaron impunes un 35% de los homicidios mientras que en el 2022 esta cifra trepa a 49%, este brutal crecimiento de la tasa de impunidad debe alertarnos sobre la eficiencia de la policía y la sensación de indefensión que siente nuestra sociedad.
En mayo del año pasado el ministro Heber anunciaba con bombos y platillos que la cartera que él dirige tiene un plan de seguridad centrado en evitar homicidios, ahora bien, ni la población, ni la oposición y ni siquiera los propios socios de la Coalición de Gobierno tuvimos acceso a dicho plan, que luego de los sucesos acaecidos y las propias declaraciones del propio ministro tenemos derecho a pensar que dicho plan nunca existió.
En marzo de este año el ministerio, ahora sí, el ministerio presenta 15 medidas para una estrategia de seguridad integral y preventiva ya no para reducir los delitos sino para prevenir y luchar contra una actividad delictiva que el ministro hipotetiza que es la causante de los delitos: el narcotráfico. Estas medidas fueron vistas como insuficientes e incluso cuestionables incluso por los propios socios de la coalición.
La negligencia e incompetencia del gobierno en materia de seguridad no solo no nos permitió aprovechar y consolidar la drástica caída de la criminalidad que en todo el globo ocurrió a causa de la pandemia, sino que esta paupérrima gestión ha hecho aumentar las muertes violentas y la impunidad de estos crímenes.
Dos nuevos espacios abrieron para construir el triunfo a favor de las grandes mayorías. En este caso, los compañeros dieron marcha a casas 609 en Aquiles Lanza, Montevideo, y Pueblo Nuevo, Canelones.
El compañero Agustín Mazzini interpeló a las autoridades de la educación por los notorios problemas edilicios en liceos y la peor elección de horas docentes en décadas.
La gestión deficiente en el proceso de elección de horas docentes y la falta de planificación adecuada están generando graves problemas en el sistema educativo uruguayo. Escribe Agustín Mazzini.
Separación del cargo y retención de haberes al director del liceo IAVA de Montevideo por negarse a cumplir una disposición autoritaria de Secundaria.
Entendemos que el proyecto de ley presentado por el Poder Ejecutivo genera un complejo antecedente al cambiar mediante una mayoría circunstancial la gobernanza de una universidad que fue creada a través de grandes consensos políticos, más allá de la validez constitucional de esa modalidad.
Lo que destacó a este período de transformación educativa –y caracteriza su desarrollo actualmente– es la falta de participación de los principales actores del sistema, la carencia absoluta de sustento empírico y teórico de los cambios impuestos, entre otros temas.