Compartimos las palabras de Mariana Píriz en el cierre del XI Congreso del MPP que celebramos este 19 de marzo de 2023.
Buenas tardes compañeros y compañeras. Realmente es emocionante ver este club lleno de tantos queridos compañeros y de tantas queridas compañeras que se vinieron de cada rincón del país este fin de semana para seguir frotándonos las cabezas, para seguir pensando y para seguir construyendo nuestra organización.
Iniciábamos allá por septiembre, cuando encendíamos la llama de los fogones y cuando salíamos a invitar a otros que están cerca de nuestras ideas, pero también a los que no están tan cerca de nuestras ideas para que vengan a conversar y a pensar con nosotras y con nosotros, el país que tenemos, pero sobre todo el país que queremos.
Muchas cosas pasaron desde nuestro último congreso. Volvió la derecha al gobierno y con una pandemia de por medio que costó, que costó la vida de tantos compatriotas. Hoy, a tres años de eso, vemos como nuestro pueblo está sumergido en la pobreza y en el hambre. Un gobierno que tiene muy claro cuáles son, cuál es su pertenencia de clase que gobierna para los que más tienen, para los pudientes, esos que vinieron prometiendo el derrame y que hasta ahora, solo han repartido la miseria. Y frente a esa realidad, los militantes y las militantes hemos dado muestras contundentes de solidaridad en las ollas, en los merenderos, armando canastas y podría seguir nombrando muchos otros ejemplos.
Los y las militantes nos juntamos, nos organizamos, rompimos las estructuras de nuestras organizaciones y salimos a juntar firmas. Recorrimos cada rincón de nuestro país dejando el cuero en la estaca para tratar de ponerle un freno a lo que fue el recorte brutal de libertades y de derechos que implicó la LUC. No llegamos, pero sí sabremos los militantes y los militantes de dar pelea, de perder, de caernos, pero sobre todo de levantarnos. Si sabremos, de no rendirnos. Este modelo de desigualdad que nos imponen. Solo genera que las y los trabajadores vengamos perdiendo salarios sostenidamente, pero que además somos las y los trabajadores los que estamos en los peores lugares de trabajo y que además estamos condenados a la informalidad. Un gobierno que se llenó la boca en campaña con la importancia del interior y que hoy en el interior lo único que vemos es como crece el desempleo y se encrudece la pobreza. Y si no, que le digan a los peludos de Bella Unión, a los Trabajadores y a las trabajadoras citricolas de Salto, de Paysandú, de Young, a los trabajadores forestales, cómo hacen malabares para llegar a fin de mes. Así están los trabajadores del comercio y del servicio, que además ven cómo sus puestos de trabajo son sustituidos por máquinas. Y como si fuera poco, este gobierno ahora nos quiere imponer una reforma de jubilaciones y pensiones que lo único que hace es hacernos trabajar más y ganar menos. Y nos metió de prepo una transformación de la educación que solo hipoteca el futuro de nuestros gurises y de nuestra gurisas.
Esta etapa, compañeros y compañeras, nos obliga, sobre todo a nosotros, nos obliga a redoblar los esfuerzos, a levantar viejas banderas y a instalar otras tantas nuevas. Nos obliga a reflexionar juntos sobre el futuro de nuestro país, sobre el futuro de nuestro pueblo, sobre el futuro del trabajo también. Porque somos los pueblos los que escribimos la historia. Y nos urge poder construir un proyecto alternativo que transmita esperanza y que contenga las necesidades de las grandes mayorías de nuestro pueblo. Tenemos el desafío de reflexionar juntos y juntas sobre una estrategia productiva. Que de respuestas a los problemas que tenemos, que son sumamente autóctonos, pero que no tengamos que importar más soluciones. Pero sobre todo que tenga como eje central el trabajo, el empleo y superar la inequidad territorial. Nos urge construir un proyecto que tenga a las personas como centro, con un verdadero desarrollo nacional, que sea integrado, que sea soberano. Y que además genera un proceso en el cual cada vez más los trabajadores y las trabajadoras seamos parte de la gestión de las empresas, donde identifique la necesidad de incorporar nuevas tecnologías, nuevas inversiones, pero sobre todo que entienda la necesidad de los trabajadores y las trabajadoras de calificarse, de formarse para poder trascender lo que hemos hecho hasta ahora.
Compañeros y compañeras culminamos este congreso levantando bien alto la bandera de la esperanza. Reafirmando nuestro compromiso con las causas populares, reivindicando todas y cada una de las luchas que dan todos nuestros compañeros y compañeras. Levantando también la causa de los compañeros que hoy ya no están con nosotros. La causa del Bicho. La causa de Gabriela. La causa de nuestro querido Cincunegui. Para nombrar algunos que ya no están, pero nos siguen acompañando en este proceso, en este camino. Porque hacer como hoy nuestro compromiso sigue con las y los de abajo, nuestro compromiso es seguir construyendo junto con el pueblo, así que arriba nostras y nosotros, arriba cada uno de los compañeras y compañeros que día a día se rompen el alma militando, arriba el MPP y a seguir construyendo una patria para todos y para todas.
La distinción que creó Simón Bolívar y que el país hermano entregó a nuestro querido Pepe Mujica por su labor hacia la unidad colombiana.
La emoción de dos amigos que ofrecieron sus energías por la unidad popular y la mejora de los más sumergidos de nuestra América.
Mensaje de José "Pepe" Mujica en el Congreso del Centro Latinoamericano de Administración para el Desarrollo (CLAD).
El presidente electo, Yamandú Orsi, nombró al compañero Alejandro Sánchez como próximo secretario de la Presidencia de la República.
"Uno tiene que ser agradecido con lo que hicieron estos veteranos por mí", dijo el presidente electo de todos los uruguayos, Yamandú Orsi, luego de visitar a Pepe y Lucía en su chacra.
“Voy a ser el presidente que construya una sociedad más integrada, un país más integrado, donde además y a pesar incluso de las diferencias, jamás nadie podrá quedarse atrás”.