“Si la política no genera una esperanza y un camino no sé qué sentido tiene”, dijo Pepe Mujica, que seguirá la militancia hasta el último día.
Pepe mostró su preocupación por una próxima campaña electoral cargada de reproches y agresión, cuando debería estar cargada de debates sobre un porvenir cargado de desafíos como los que comentó a la militancia en el Parque Artigas de Las Piedras.
¿Cómo hacemos crecer a la economía para recaudar más y mejor? ¿Cómo destinar esos recursos para adelantarnos a este cambio civilizatorio que recién comenzó? ¿Cómo multiplicamos la inversión en el país? ¿Cómo mejoramos el presupuesto educativo?
Todos estos aspectos deberían estar en la próxima campaña electoral, propuso en diálogo con el semanario Búsqueda. Como la Ley de Riego, aprobada hace ocho años y aún sin reglamentar.
O los tres bancos públicos reducidos a un bajo perfil cuando, subrayó, tienen que competir. Una discusión con altura permitirá encontrar caminos intermedios para acordar políticas para varios gobiernos.
Rehuyó de las explicaciones clasistas que le endilgan a Pepe un perfil polarizador. Al contrario. Estoico, opuso sus ideas al consumismo actual que nos hace funcionales a la acumulación: “una mentira”, calificó.
Consultado por si observa a alguien que esté pensando en un proyecto distinto para el país, respondió: “Si la política no genera una esperanza y un camino no sé qué sentido tiene”.
También respondió Pepe sobre su rol en estos próximos meses: Quiero ayudar, pero no puedo sustituir a los que tienen que estar. Tengo 88 años. Hace años que vengo con la idea de pasar la posta y ayudar en lo que pueda. Pero quiero ayudar. No quiero prescindir.
“Yo nunca me voy a retirar de la política, hasta que me muera. Jamás me voy a retirar pero me tengo que dar el lugar que puedo cumplir. Puedo ser un viejo consejero de la tribu”, añadió.
En este marco le preguntaron por nuestro compañero, Yamandú Orsi. “Tiene los pantalones largos. Yo lo apoyo con convencimiento, pero no fabrico muñecos”, dijo Pepe. “Ha hecho solo su rumbo”, sintetizó Pepe. Tiene una ventaja bárbara con los 20 años de gestión en Canelones, un departamento que es como un “pequeño” Uruguay.
Al final de la entrevista, Mujica recalcó que el presidente va a estar activo en el período de la campaña electoral. Más aún con los plebiscitos que se votarán junto a los comicios. A su entender, las consultas populares deberían presentarse por fuera de los períodos electorales. Consideró que la gente se debería poder jubilar luego de los 60 años, pero también juegan otros factores, advirtió. Entiende que la ley debe ser reformada y debe tener en cuenta los efectos del avance de la civilización digital.
Por otro lado, aseguró que Uruguay debe estar contento con el nuevo impulso que Lula da Silva le imprimió a Brasil. Por ejemplo, tras cuatro años de trancazos, los Fondos de Convergencia (Focem) apoyarán distintas iniciativas claves para la frontera con el país vecino y para la educación terciaria pública.
Sobre el mandatario argentino, expresó que, a pesar de su mesianismo y fanatismo, finalmente la realidad va a terminar imponiéndose porque nuestro mercado agregado de valor está en nuestro vecindario. El asunto es que el embrollo no lo paguen los sectores más embromados porque, en definitiva, el “que lo pague la casta” siempre es una mentira.
La emoción de dos amigos que ofrecieron sus energías por la unidad popular y la mejora de los más sumergidos de nuestra América.
“Voy a ser el presidente que construya una sociedad más integrada, un país más integrado, donde además y a pesar incluso de las diferencias, jamás nadie podrá quedarse atrás”.
Desde Las Piedras, donde el interior y el país metropolitano se abrazan, Yamandú Orsi llamó a reconciliar las distintas realidades para construir un país de certezas.
Proponemos un cambio en el que todos podamos vivir tranquilos, con más solidaridad, con más bienestar. “Sabremos cumplir”, dijo Yamandú Orsi.
Pepe estuvo en la localidad de San Bautista, en Canelones. Dando el último tranco para apoyar la posibilidad de un gobierno para todas y todos, con Yamandú Presidente.
No tiene antecedente en la historia de los últimos 50 años que un gobierno haya mantenido congelado los ingresos durante 40 meses, recordó José Mujica.