Mientras la compañera y precandidata Carolina Cosse se encontraba en el oeste del país como parte de las recorridas que comenzó a principio de febrero, estuvo conversando con la gente del espacio InterCambio de radio M24. En tal instancia, la exministra de Industria, Energía y Minería trató varios de los temas más importantes en torno al presente y futuro político de nuestro país.
Entre otros temas, Cosse aborda el vínculo entre la izquierda y los feminismos, la rendición de cuentas, el trabajo y la diversificación de los sectores de la economía, la educación y la seguridad pública. A continuación una pequeña reseña del abordaje de la compañera y el audio a la entrevista completa.
En el marco del mes de la mujer y el 8 de marzo, el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, Cosse es consultada por la relación entre los feminismos y la izquierda como dos perspectivas de interseccionalidad. «Hoy, ¿ser de izquierda necesita de una perspectiva feminista? ¿Y llega tarde el Frente Amplio a esta perspectiva?», preguntan a la compañera. A lo que Cosse responde:
«Creo que sí, (…) hay que tener una perspectiva feminista. El feminismo no es uno solo, hay muchas corrientes feministas, pero lo que las une es el anhelo de un mundo mejor, de un mundo sin reglas de dominación, de un mundo más justo y equitativo, con igualdad de oportunidades. Y eso está en la columna vertebral del sentimiento de izquierda. En definitiva, para mi es un sentimiento de profundo humanismo, de poner en el centro el ser humano.
Lo importante es que (el Frente Amplio) llega y que también, al llegar en este momento, también puede releer la importancia del movimiento social, la importancia en la relación profunda entre la izquierda (en su forma política) y los movimientos sociales. Me parece que, en algún sentido, la sociedad está más madura que algunas estructuras políticas».
Al ser consultada sobre la rendición de cuentas del pasado viernes, lo que el Frente Amplio ha construido durante los últimos 15 años y los cambios de mayor trascendencia en los necesariamente se deberá trabajar a futuro, la compañera señaló que los esfuerzos se deben dar en todos los ámbitos.
En este sentido, advirtió que el debate previo en torno a la rendición no era más que un debate menor que buscó desviar la atención de lo verdaderamente importante: el carácter profundamente democrático, transparente e informativo que marcó la rendición de cuentas de Tabaré Vázquez. En las propias palabras de la compañera, Cosse señaló:
«Yo creo que, justamente, gracias a la conducta que han tenido los gobiernos del Frente Amplio, a los logros que se han alcanzado —que es verdad que no han sido parejos en todos los rubros, pero también es verdad que ha habido avances en todos los rubros— eso es lo que nos permite pararnos con otra perspectiva y avizorar cambios profundos, más profundos.
Hablo de una segunda generación de cambios y me parece que hay que encarar ahora una forma de trabajar mucho más integral, no solo coordinada, sino integral y de gran avance en todos los rubros: en la producción, en la seguridad, en la salud, la vivienda, la educación, en todos. Y con una mirada disruptiva en muchos de ellos».
En materia de trabajo y producción, la compañera Cosse señaló que «para tener resultados distintos hay que hacer cosas distintas», por lo que con «la misma matriz productiva» que existe ahora, no se podrá recuperar el empleo perdido en los últimos 3 a 4 años, entre 50 000 y 60 000 puestos.
Siguiendo a la compañera, nuestro país tiene una estructura productiva considerablemente primarizada y «(…) al sector primario hay que darle mucho apoyo» en tanto «el mundo ha avanzado mucho más rápido que la tecnificación del campo», por lo que los procesos de adaptación tecnológica se deben acelerar. En este aspecto, Cosse refiere:
«(…) Nuestra mirada técnica, tecnológica y científica hacia los productos primarios tiene que ser múltiple, más incremental. Eso por un lado, por otro hay que reconocer en Uruguay signos de desarrollo de otros rubros de la economía y proporcionarles medidas estructurantes para que se afiancen, llevar el trabajo de las tecnologías de la información al interior. Toda la industria de TIC está centralizada en Montevideo, son 26 000 puestos de trabajo y en el interior tenemos capacidades, pero nos faltan empresas de software —tenemos algunas—, hay que llevarlas al interior.
Las industrias creativas (…), de software, química, biotecnología… son todos espacios que hay que promover, porque de la misma manera que no todos vivimos del campo, todos vivimos en una economía donde lo agro es muy importante y hay que darle mayor peso específico para que complementen el equilibrio económico esas otras industrias. El turismo, por ejemplo, donde es importante la inversión en infraestructura, el valor agregado, tratar de desestacionalizarlo lo más posible… se ha hecho mucho y hay que seguir haciendo (…) Si podemos complejizar la matriz productiva apostando a la diversificación tecnológica, vamos a poder darle herramientas a la población para el nuevo mundo del trabajo».
Y en relación con la preparación y la formación de nuevas generaciones de profesionales y especialistas, la compañera señaló que Uruguay debe apostar a una necesaria educación en ciencias. Al respecto, señaló:
«Nos faltan ingenieros y, siempre, las nuevas estructuras económicas se hacen con profesionales, pero sobre todo con técnicos intermedios, que es una forma de consolidar a la nueva clase media que está surgiendo. Eso implica un cambio muy profundo que hay que hacer en la educación, que es de definición de alto nivel y con todas las letras: Uruguay tiene que tener una tendencia, una definición de educación en ciencia. Porque, justamente, frente a los cambios complejos y acelerados constantes que está teniendo el mundo, la forma de que los humanos tengamos la posibilidad de tener formación que nos permite adaptarnos rápidamente a nuevas tecnologías es tener una formación en ciencia básica.
Ese es uno de los cambios muy profundos de los que estoy convencida y que voy a impulsar en la educación: una definición por la educación en ciencia. Que es profundamente humanista, porque en estos momentos de cambios acelerados, las profesiones en letras adquieren otro significado. El avance de la tecnología nos va a enfrenar —y ya nos está enfrentando— a dilemas éticos a los que nunca estuvo enfrentado el ser humano. Y esos dilemas éticos precisan de gente que sepa filosofía, historia y derecho desde un punto de vista profundo».
En relación con la seguridad pública, la compañera Cosse destacó que es el tema de mayor prioridad para el próximo gobierno. Además, hizo especial hincapié en la necesidad de mirar hacia adelante y abordar esta problemática desde una visión integral, con una perspectiva multidisciplinaria y trabajando en los 4 diferentes aspectos que componen a la seguridad pública.
Y para ello, por supuesto, hay que abandonar el actual modelo de estructuración, que data de mediados del siglo pasado y al que incluso algunos personajes de la oposición intentan volver a preponderar. En palabras de la compañera, Cosse apunta:
«(…) Hay que tener una perspectiva histórica razonable y entender que en los gobiernos del Frente Amplio encontraron una estructura de seguridad que databa de los años 50, 60 y 70 sin ningún cambio. Al día de hoy, por ejemplo, la estructura territorial de las comisarías es de los años 50, porque están distribuidas así desde el 50 y ninguna ha cambiado de lugar.
Yo no quiero volver a ese modelo de anotar en un cuaderno y hay que tener consciencia de que la estructura territorial es de los años 50 cuando los territorios han cambiado. Los territorios ya no son solo la geografía, sino la geografía y la tecnología.
El principal tema para el próximo gobierno es la seguridad y la seguridad tiene varios aspectos: uno de prevención, uno de represión, otro que tiene que ver con el cumplimiento de las penas y otro que tiene que ver con la rehabilitación. Y hay que trabajar en los 4 aspectos de manera eficiente. En la parte de prevención, por ejemplo, hay que tener una visión integral, muy integrada, hay que tener un trabajo conjunto con el Poder Judicial y el Legislativo tomando cada uno de los problemas que nos preocupan, porque es muy difícil resolverlos si no está el Poder Legislativo o el Judicial. Tienen que estar los 3 en la mesa y tiene que haber integración de equipos.
(…) El miedo es una acción que tiene su lugar en una estrategia de seguridad, pero tiene que tener su lugar y no hay que salir al golpe de balde, a lo bruto, a lo guapo, a decir que “hay que matarlos a todos”. No es así. Eso nos conduce a la violencia y la desgracia, tiene que tener su lugar, efectivo, respetuoso de la ley, la constitución y los derechos humanos, pero efectivo. Y rápidamente habrá que ir construyendo una mentalidad de agenda de derechos en paridad con una agenda de responsabilidades».
La entrevista completa y el tratamiento de estos y otros temas aquí:
Los principales desafíos del sistema carcelario no se atienden: hacinamiento, adicciones, salud mental, analfabetismo, detalló Bettiana Díaz.
"Si alguien piensa que podemos prescindir de los aportes de Mario..., donde sea; a esa gente la quiero siempre en mi equipo".
Un nuevo farol para los compañeros, como los bautizó la compañera Lucía Topolansky a los locales en los barrios y pueblos de nuestro país, prendió la esperanza en Santa Lucía, Canelones.
El fracaso más absoluto del Gobierno es la juventud que se quiere ir del país, incluso más que durante la crisis de 2002, recordó Pacha Sánchez.
En los recursos que volcamos hacia los más jóvenes "se nos va el futuro, la panza y la cabeza de los gurises". Es la batalla relevante, señaló.
“Por ser de izquierda y progresistas ponemos en el mismo escalón la libertad, la igualdad, los derechos políticos y los derechos sociales. Eso es ser de izquierda y eso es ser progresista”.
